Seguidores

26 de octubre de 2011

Radio María / Entrevista conmigo mismo (4ª parte)

P. ¿Y como fue tu vida con Radio María desde entonces?

R. Pues mire usted, mi vida no fue fácil. Porque yo muy pronto en Radio María, pasé de ser un voluntario que vino a echar una mano a un voluntario que tenía que tener 18 manos. Y eso humanamente no es posible. Pero como esta es una tarea donde también contamos con la ayuda divina, digamos que la Gracia debe ser la responsable de que yo haya aguantado lo que he aguantado.

P. ¿Y que es lo que ha tenido que aguantar?

R. Lo primero que destacaría es que muchas veces he renunciado a mi propia vida, para dedicarme a este apostolado por el bien de los demás.

P. ¿En que sentido?

R. Bueno, cuando le tienes que dedicar tantas horas de tu tiempo a una tarea, eso te quita tiempo para otras cosas.

P. Pero esto es voluntario, nadie le obliga.

R. Es voluntario, pero si que me obliga alguien. Mi conciencia.

P. No le entiendo bien.

R. El joven está muy ocupado trabajando o buscando trabajo, o estudiando. El mayor tiene limitaciones físicas. Otros están metidos en demasiadas cosas, y no tienen tiempo. Así que me fui responsabilizando sólo de mantener con vida este grupo de Málaga. Hacía falta alguien que realizara las transmisiones. Y yo me responsabilicé. Hacía falta alguien para tareas de secretario, y yo tuve que desempeñarlas. No había nadie que perseverara haciendo tareas de difusión, así que yo cogí el timón. Finalmente como yo era el responsable de todo, pasó lo natural. Que me nombraron oficialmente Responsable Provincial en 2008. Y para desempeñar esta tarea y que la cosa funcione, no he tenido más remedio que dedicar horas y horas a Radio María durante estos años.

P. Perdone que insista, pero nadie le obliga.

R. ¿Aparte de mi conciencia? Pues no. Fíjese que hasta el mismo director me dijo en una ocasión que primero "mis obligaciones familiares-laborales" y después el voluntariado.

P. ¿Entonces?

R. Si le hubiera hecho caso, no estoy seguro que existiera el grupo de Málaga en estos momentos, ni que se hubieran hecho todas las cosas que se han hecho estos años.

P. ¿Se cree usted imprescindible?

R. Eso depende. Algunos dicen que imprescindibles no hay nadie, sin embargo dicen que todos somos necesarios. Y si yo era necesario...no me podía marchar. Cuestión de principios, de honor, y de conciencia.

P. ¿Y ahora en que situación estamos?

R. Pues mire, ahora estamos en una situación muy complicada. Yo ya las he vivido antes de diversas formas, pero estoy en proceso de resolver esta, y el futuro va a depender en esta ocasión mucho de lo que suceda en los próximos meses. Aunque nunca se sabe, yo no me veo sirviendo en este Apostolado toda mi vida, si no se dan unas condiciones que hoy no se están dando.

P. ¿Que condiciones?

R. Permítame que me reserve eso para mi en estos momentos. Tengo mis planes, y mis ideas para el futuro, pero Dios sabrá, yo no se nada ahora.


No hay comentarios: