EL PERDÓN EN LA BIBLIA

La misericordia de Dios es infinita. ¿En que sentido? En que siempre puedes contar con su perdón. Siempre significa que es infinito, no tiene medida. ¿Para qué necesitamos ser perdonados y de qué necesitamos ser perdonados y por qué necesitamos ser perdonados? Cuando yo era poco más que un adolescente me hacía preguntas. Hoy conozco mejor.

EL PERDÓN
antes comienzo diciendo que en este como en muchos temas relacionados con la fe cristiana, a veces puede haber confusión. Dios se agrada de aquella persona que busca sinceramente la verdad en su Palabra. Por eso te invito a hacerlo también. Verás: para entender correctamente un pasaje de la Sagrada Escritura (La Biblia), es conveniente conocer lo mejor posible que en el Nuevo Testamento hay 4 evangelios que son complementarios entre si, especialmente los tres llamados sinópticos. De no hacerse así, puede haber algún tema que no se interprete de forma correcta. Y me atrevería a decir que hoy en día son muchos los que al no tener en cuenta esto, pueden estar a veces en el error en ciertos temas, o cosas que creen que son así durante largo tiempo. Por supuesto, la Biblia siempre debe ser interpretada a la luz de la Sagrada Tradición de la Iglesia, es decir, si tu interpretación de un tema no coincide con el de la Iglesia que tiene ya 21 siglos de historia, debes analizar bien y tener cuidado. Pero como hasta las mismas Escrituras nos alertan de que tengamos cuidado porque hasta dentro de la misma Iglesia se puede inducir a veces al error por diversos motivos, es también bueno y aconsejado que tu mismo busques comprender lo que una cosa quiere decir, porque es palabra revelada por el Espíritu Santo, que el mismo Espíritu asiste a quien busca con sinceridad y apertura de corazón.

 Religión a la carta. 
 Habrás oído esta expresión supongo. En la Iglesia Católica sería aquella persona que escoge de la Palabra de Dios, aquellas cosas que le es más fácil de seguir o que comprende mejor o que acepta, y rechaza aquello que le es molesto o contrario a sus propias ideas. Uno de los temas más candentes que se me ocurren ahora de religión a la carta es aquella que dice que las personas homosexuales tienen derecho al matrimonio y que se sienten o consideran cristianas. Pues con todo el respeto te diré que eso no es así: tu, si eres homosexual eres libre como cualquier ser humano de elegir como quieres vivir tu vida, pero no digas que Dios aprueba que pienses eso. Son dos cosas diferentes. Puedes ser muy bueno y caritativo y eso es de alabar, pero si hay otros temas en los que eliges tu como si la Iglesia fuera un restaurante y la Biblia una carta de platos, te estás equivocando. Además que incluso pides platos que no están ni en la carta. Eso ya es rizar el rizo. Créeme, no tengo nada contra ti como ser humano y te voy a respetar tu libre decisión, nada de homofobia, pero no me digas cosas que no aprueba Dios y me quieras convencer, porque la Biblia dice muy claro que es y que no es. Hasta setenta veces siete. Esto va un poco largo, espero lo puedas leer hasta el final. Dice Jesús que debemos perdonar hasta setenta veces siete. Esta expresión es usada ya por primera vez en el libro del Génesis, no es algo que Jesús se saca de la manga, sino una forma de decir un número ilimitado de veces. Correcto. Debemos perdonar siempre, y eso cita el Evangelista San Mateo en 18:22 que Jesús dijo. Segundo punto: ¿A quién debemos perdonar siempre? Responde la Biblia: a un hermano que pecare contra mí. Ah vale. Debo perdonar siempre a un hermano que peque contra mi. Entendido. ¿Y que es un hermano? Pues si miramos la Biblia, la palabra hermano se usa para dos cosas. Una para designar a cualquier pariente en el pueblo judío, y otra para designar a alguien de tu propia religión, o podríamos traducir al tiempo actual, a alguien de la Iglesia, un bautizado. Hermanos nos llamamos en las cofradías. Hermanos somos en la Parroquia, los grupos, los distintos movimientos. Aún hay una definición de "hermano" dada por Jesús que lo complica todo: según Jesús mi hermano es aquella persona que escucha la Palabra de Dios y la pone por práctica. Por tanto, fuera de eso no sería técnicamente un hermano, pero como creo que no debe haber nadie bautizado que no tenga un mínimo de deseo de ser honesto, me centraré en la definición segunda: los miembros de un grupo o comunidad cristiana. Ah vale, entonces si un hermano pecare contra mi debo perdonarlo siempre. Entendido. Lo dice Jesús. Tengo otra pregunta: ¿Que es pecare contra mi? Pues sabemos que pecar es hacer algo que desagrada a Dios, que va contra los mandamientos. Por tanto si mi hermano me roba, está pecando contra mi. Si mi hermano me difama, está pecando contra mi, etc., etc. ¿Y debo perdonarlo siempre que haga algo contra mi? Pues eso dice Jesús, si. Pero eso es muy difícil. Ya. ¿Y ya está? No. Hay algunas cosas más que debes saber. Como dije en un comentario anterior, la Biblia hay que leerla entera. Hay que coger todos los puntos que hablan de un tema para acercarnos a lo que Dios enseña como medida lo más perfecta posible. Eso dice San Mateo, pero San Lucas dice otra cosa más que hay que tener en cuenta si se quiere ser más como Jesús enseña. San Lucas dirá que Jesús efectivamente dijo: "Perdonar hasta siete veces al día", que significa lo mismo que setenta veces siete. Es una llamada a tener paciencia con el hermano, entiendo yo, más que el perdón infinito, pero podríamos decir que es lo mismo. He visto que tenemos tendencia a no conocer lo que dice San Lucas aquí, y tampoco se enseña a veces correctamente por lo general. ¿El motivo? Pues que San Lucas añade a lo de perdonar siempre, algo que normalmente no hacemos o hacemos mal. Dijo Jesús: "Si tu hermano peca contra ti, repréndele". Aquí la mayoría se asusta y se siente incapaz de hacer esto, y a veces como digo si lo hacemos lo hacemos mal. Reprender no es echar la bronca. Un simple toque suave de atención puede bastar. Pero queremos evitar los conflictos porque queremos ser siempre aceptados y bien vistos por todos, y eso nos impide hacer lo que Jesús dice. El reprender no es echar la bronca, insisto. Pongo un ejemplo real que he visto: un hermano le dice a otro que tiene cara de perro, y además se lo dice de verdad, y lo humilla delante de otros. ¿Que debe hacer el hermano insultado así? Algunos dirán que hay que poner la otra mejilla porque también lo dice Jesús. Yo digo que depende de dos cosas: del grado de la ofensa, no es lo mismo sólo que delante de otros, y depende de lo que sepas de antemano que puede causar que le contestes. Pero la Biblia insisto hay que leerla entera. Jesús aquí dice "repréndele". Si te quedas con lo de la otra mejilla, es religión a la carta, si valoras todo en conjunto es más justo. El hermano ofensor fue contestado también públicamente, y el otro le pidió disculpas. ¿Lo ves? Si no le dices, si no le reprendes, seguiría en su pecado el que ofende. ¿Ves como reprender sirve también para ayudar al otro? Habrá otras veces que sea mejor poner la otra mejilla. ¿Por qué? Porque pueda ser peor reprender en ese momento. Hay que saber. Luego está el tema de que reprender, dice la Biblia que hay que hacerlo a solas con el hermano, y si no te oye, lo hagas delante de testigos. Esto lo dicen San Mateo pero no San Lucas. Correcto. Reprender y corrección fraterna es lo mismo. Dios es justo, y nosotros tenemos que tender a ser justos. No todos los pecados son iguales. A veces alguien te ofenderá sin darse cuenta, otras veces serán cosas de poca importancia, otras serán faltas pequeñas porque la persona no da para más en ese momento. Dice Dios también que tenemos que medir con medida justa para esperar que nos midan igual. Resumiendo: Debemos perdonar siempre al hermano que peca contra nosotros, pero Jesús nos indica que tratemos de ganar al hermano también hablando con el. Y lo mismo que dice digo dice Diego, aquí no se presta mucha atención creo yo: dice San Lucas esto: 3 ¡Tened cuidado! Si tu hermano peca, repréndelo; y si se arrepiente, perdónalo. 4 Y si peca contra ti siete veces al día, y vuelve a ti siete veces, diciendo: ``Me arrepiento, perdónalo. Uff. ¿Te das cuenta lo que dice aquí? 

Veo que para Dios el tema del perdón es algo importante. Quiere que se haga bien. Tal vez por eso la Iglesia a veces pareciera que confunde un poco o no termina de atreverse a enseñar abiertamente lo siguiente: "Si para que un sacerdote te absuelva de tus pecados, es preciso que te arrepientas, y e mismo Jesús cuando instituye este Sacramento en Juan 20:23 indica que "se retengan pecados" (si no hay arrepentimiento), la misma medida es entre dos hermanos. Pero la gente he visto que se lía a veces son esto porque no entienden tal vez el padrenuestro, que no dice algo contrario al texto de San Lucas. También hay confusión con la frase de Jesús: "Padre perdónalos porque no saben lo que hacen" e interpretamos a veces como si estuviera dando a entender que el perdón anula el Evangelio de San Lucas. Explico este tema otro día. Quiero insistir en que no se trata que vayamos por la vida reprendiendo a todo el que nos ofende, eso tampoco, pero a veces miramos a otro lado, nos envenenamos con el hermano, dejamos de tratar con el tal vez, y perdemos amistades. Y tal vez fue porque no se dijo nada y nadie pidió perdón.

El padrenuestro es la mejor oración posible porque es la que enseñó Jesús. Hay una petición que se refiere al perdón. "Perdona nuestras ofensas como nosotros perdonamos..." Como apunté ayer, ofensas pueden haber de muchos tipos y debemos discernir buscando siempre la mayor misericordia posible y la mayor justicia posible a la hora de tratar al hermano que nos ofende. A veces nos podemos ofender por cosas que no son ofensas y tomarlo como ofensa, y a veces te ofenden de forma directa siendo más grave. De lo que trata esta parte del padrenuestro, a mi entender actual es que no guardemos rencor a nadie por sus ofensas. Eso equivale a perdonar. Que nos pongamos en las manos de Dios con humildad deseando la paz a todo el mundo, y aunque por circunstancias eso parezca imposible, confiar en que Dios todo lo puede. Olvidar una ofensa no se puede a veces en poco tiempo por razones de que tenemos memoria, pero mi experiencia me dice que si lo quieres y lo pides a Dios, el te concede "olvidar" de algún modo y te va sanando con el paso del tiempo. En esto, imagino que a unos les será más fácil y a otros más difícil. Pero una cosa tengo clara: cuando vas a rezar el padrenuestro en la Iglesia, o en cualquier lugar, y pronuncias las palabras relativas al perdón, asegúrate que tu corazón es sincero y que deseas ardientemente la paz con todos o de lo contrario estarás tratando de engañar a Dios, cosa que es imposible porque el conoce lo que hay dentro de cada persona. Es mejor decir a Dios, que no sabes perdonar o que no consigues perdonar, que decirle que vas a perdonar y luego no hacerlo. Piensa esto. Ya dije ayer que según el Evangelio de San Lucas, el perdón debe estar unido muchas veces a la corrección fraterna, y que esto no se practica mucho, y por eso hay a veces enemistades y rencillas sin resolver entre hermanos. Sin embargo, el paso previo siempre debe ser el que enseña el padrenuestro: es decir, perdonar a tu hermano de corazón, aunque siga existiendo un problema. Eso abrirá las puertas a la reconciliación. Caso contrario será imposible, y encima estarás cometiendo un pecado contra Dios cada vez que rezas con las palabras de Jesús. Mejor sería omitir esa parte del padrenuestro que hacerlo en falso.

PADRE PERDÓNALOS PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN.
 Ya he explicado en los días anteriores acerca de como dice el Evangelio que hay que perdonar, cuantas veces y en que condiciones. Explicaba también que según mi entendimiento, hay que ver todo lo que la Biblia dice sobre un tema en conjunto, y si se escoge un pasaje sólo y aislado se puede tener el peligro de que se caiga en el error doctrinal o que no se esté haciendo correctamente algo. Voy a poner un ejemplo más: hay gente que ha escuchado que el Papa es infalible, es decir que no se puede equivocar. Esto es correcto, pero hay que entenderlo bien. El Papa es infalible sólo cuando se pronuncia de una manera que se llama ex cathedra, esto es, cuando, ejerciendo su cargo de pastor y doctor de todos los cristianos, en virtud de su Suprema Autoridad Apostólica, define una doctrina de Fe o Costumbres y enseña que debe ser sostenida por toda la Iglesia. Y eso no ha ocurrido muchas veces en la historia, sólo unas pocas si comparamos con las veces en que no se pronuncia así. Esto tiene una explicación pero como no es el tema no entro más. La que seguro no se equivoca es la Palabra de Dios. Eso si, teniendo en cuenta lo que he dicho antes. Dios mismo ha dado a cada bautizado de su Espíritu Santo, y luego en el Sacramento de la Confirmación de un modo especial. Y sabemos por la misma Biblia que este Espíritu Dios lo da a quien quiere, y que se complace además en la gente sencilla de un modo especial. También por el bautismo y la confirmación de un modo especial hemos recibido de la Iglesia una misión cada uno de nosotros, de acuerdo a nuestras capacidades y a los dones de Dios. No sólo a vivir el Evangelio sino a proclamarlo con nuestras obras y palabras. A mi juicio, según lo que se, sería un error, aislar la frase de Jesús de "perdonar porque no saben lo que hacen" a cualquiera en cualquier circunstancia. Sin embargo he detectado que a veces esto sucede y algunos lo enseñan así y lo enseñan como para querer explicar justo eso: que si leemos esa frase, es como si tuviéramos que perdonar todo a todos en cualquier circunstancia. Si eso fuera así, entonces el sacramento de la confesión no tendría valor, ya que no habría porqué reconocer los pecados. Tampoco tendría valor la Palabra de Jesús que habla de que hay que arrepentirse para ser perdonado, puesto que no saben lo que hacen, y para que sea pecado enseña la Iglesia que debe haber un conocimiento y plena advertencia de lo que se hace. Esa palabra de Jesús también mal interpretada podría hacer que a cualquiera que hace el mal se le pudiera atribuir un desconocimiento del mal que hace, y eso contradice las mismas Escrituras en diversas partes, y el sentido común. ¡Claro que hay personas que saben que lo que hacen está mal y lo hacen! Por tanto, el "perdónalos que no saben lo que hacen" debería ser entendido en su contexto. Esto me podría dar para mucho, pero quiero ser breve que ya dudo que alguien haya leído hasta aquí. El contexto es el de la próxima muerte de Jesús. Esto lo han practicado por ejemplo los mártires actuando en el mismo contexto, es decir, mueren perdonando (no guardando rencor) a quien ha practicado la maldad. No mueren maldiciendo a los malvados. Porque si Jesús llamó una vez Satanás a Pedro, que serían los que lo crucificaron... Pero en esa hora, para un cristiano, la mejor actitud es la de Jesús, que también practicó por ejemplo San Esteban como muestran los Hechos de los Apóstoles. En la vida ordinaria podríamos actuar así, cuando conocemos seguro seguro que el otro "no sabe lo que hace", y esto ocurre algunas veces. Hay que discernir. Dios es quien sabe lo que hay en el corazón. Y ya expliqué ayer que ofensas hay muchas pero que no siempre que te sientes ofendido lo han hecho, a veces es nuestra propia soberbia y nuestra imperfección la que nos engaña. Por eso rezamos el padrenuestro queriendo estar en paz con todos y perdonando (no guardando rencor). Pero como también he dicho, no nos olvidemos de que en muchas ocasiones la corrección fraterna evitaría muchos problemas, y que a veces preferimos la enemistad con el otro antes que arreglar las cosas. Y que corregir tiene que hacerse con humildad y no con arrogancia. No broncas, sino un toque de atención y a seguir adelante. Si el otro no quiere ya no es tu problema. Vivir en la apariencia de una buena relación no es sano, aunque sea el camino fácil para "no tener problemas". La amargura de la enemistad al final envenena al hombre y acaba pasando factura.