La serie de TVE Cuéntame como pasó ha perdido para mi hace ya algunas temporadas la magia inicial. Y se corrobora al inicio de la nueva temporada, y después de transcurridos tres capítulos, puedo afirmar lo siguiente:
La poca imaginación y la actitud morbosa de los guionistas de la serie. En el capítulo emitido anoche, vemos al personaje de Carlos Alcantara (Ricardo Gómez) como va "mejorando". No puede tener una profesión normal y decente. De un bar de copas de la noche, ejemplo de la diversión mas mundana y salvaje de nuestros días, que contribuye al alcoholismo, drogadicción y otras cosas, se pasa a escritor de "relatos eróticos". Esto lo aderezan en la serie con todo tipo de escenas subidas de tono, entre las que intercalan otras más normales para evitar que se convierta en una película clasificada "S". Por otro lado, el personaje de Paquita, símbolo de la "mujer moderna", casada con hijos, luego divorciada y "viviendo su vida", provocando con su indumentaria, o mejor dicho con la falta de ella los instintos primarios del hombre.
Por otro lado el personaje de Tony cada día me encaja menos en el de periodista, por cierto. No me gusta como lo interpreta.
Muy buena la serie, si señor. La salva el personaje de la abuela (María Galiana). La temporada pasada me perdí la mitad de los capítulos, y esta si sigue así, hará que aproveche el tiempo en otra cosa.
Por otro lado, muy realista el cambio del régimen del 18 de Julio a la monarquía parlamentaria de 1978, donde las ansias de libertad, convirtieron a muchos españoles en libertinos.
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