En Enero-Febrero del año 2011 realicé para el padre Manuel Cantero S.I. (R.I.P) el blog para el Apostolado de la Oración en Málaga. Este surgió de una sugerencia mia al padre Cantero, en una de las salas de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús en Málaga, donde acudí a confesar o a pedir consejo, o las dos cosas. Al principio no lo vio totalmente claro, pero tampoco se negó. Me dio luz verde para que me pusiera a trabajar en ello, y rápidamente lo hice. Su primera entrada es del mes de Febrero de 2011, y lo actualizó casi a diario hasta que Dios nuestro Padre lo llamó en 2020.
El 24 de Junio de 2011, escribía acerca de la Novena al Sagrado Corazón de Jesús (hoy dejada de hacer), y de la Procesión, y decía esto:
«El jueves 23 comenzó la NOVENA AL SAGRADO CORAZÓN. Es, por decirlo así, el momento culminante de nuestro curso, la desembocadura natural del trabajo del año. Tendrá la guinda de la PROCESIÓN...
En el momento que escribo esto, algo me salta a la mente, una vez más. Un compromiso, si se hace vida, se desenvuelve en cada instante, y sólo se acaba cuando uno deshace el compromiso. Pero posiblemente nuestro mundo no está muy hecho a esas cosas tan serias.
El equívoco de que lo que es de Dios es "la devoción" nos llevará de inmediato a atender primero "la obligación" (acudir al teatro, prevenir el catarro que no se tiene, visitar al primo que se podría visitar mañana, etc.).
La NOVENA irá necesariamente creciendo en asistencia, participación en los ministerios seglares, interés de los miembros del Apostolado y de los fieles en general, en esa medida del compromiso.»
Cuando no fuera así, se acabaría "los mesmos con las mesmas", que tanto se intenta evitar. Y eso requiere toda la fuerza de entusiasmo por una idea, un servicio, una vida que está llamada a ser de APÓSTOLES. Como dice Jesús al final del sermón del Monte: cuando la casa está cimentada sobre roca.
Estas palabras del padre Cantero estában dirigidas a alumbrar una realidad que el ya venía viendo no sabemos desde cuando. Había algo de ironía en sus palabras y sobre todo ánimo de "hacer ver" de forma constructiva, pero sin callar la realidad. Pocos días después, decía esto sobre la Novena terminada:
«Pero a mí no me gusta que lo veamos todo como si hubiera sido un "éxito". Lo es en su conjunto. Pero muchos particulares pueden -deben- preguntarse por su participación y asistencia. Creo que los días de la Novena debió ser mejor, y hasta más visible, por parte de los que se consideran miembros o simpatizantes del "Apostolado de la Oración" (grupo de esta Iglesia del sagrado Corazón).»
Tras la procesión, en la puerta de la Iglesia, con el trono parado esperando recorrer los últimos metros en su encierro, el padre Cantero les manifiesta que ha meditado y ha planteado a los presentes UN SUEÑO. Yo ya no recuerdo si fui yo el que le di la idea que le llevó a eso, o no. Lo que si recuerdo es que varias veces le comenté que el Apostolado de la Oración en Málaga y la Procesión debían ir en concordancia, y otras cosas más que hablamos. De todo eso fueron saliendo estas ideas y otras cosas que se convirtieron en pasos y acciones que se realizaron para cumplir unos objetivos.
Quedaba claro que la aportación económica que hacía el grupo participativo cada primer viernes de mes y tercer viernes en la Escuela de Oración, era fundamental para la salida del Sagrado Corazón de Jesús. También quedaba claro que se necesitaban unas personas para todo lo que concernía a la procesión en si. Pero el padre Cantero invitaba precisamente a ese "segundo grupo" de personas a participar de lo esencial durante el resto del año. Y lo hacía sin abundar en más consideraciones, a su estilo, bastante distinto al mío, mucho más directo. El padre Cantero INVITÓ en el NOMBRE DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS A SOÑAR.
Yo estaba totalmente de acuerdo con el sueño del padre Cantero y además soñaba con una procesión del Sagrado Corazón grandiosa que cada año creciera y atrajera a más personas a acompañar y participar.
Trazamos un plan y comenzamos a trabajar en el después de esa procesión de 2011.
La historia continuará en el próximo capítulo, pero adelanto, que en el año 2023, la Procesión del Sagrado Corazón de Jesús no saldrá por primera vez no por causa de una pandemia o fuerza mayor como la lluvía, sino por algo que para mi está íntimamente relacionado con lo que iniciamos el padre Cantero y yo en 2011.
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