Pues si, de hecho lo es, aunque haya alguien que no lo sepa. La Misa es una FIESTA, y es muy alegre. El problema es que por ponerles un ejemplo, la Misa en si es una FIESTA ALEGRE, pero es igual que cuando uno asiste a una celebración familiar, o un acontecimiento gozoso, una fiesta de cumpleaños. Si no experimentas en ti, si no llevas en ti la alegría a la fiesta, la alegría estará ahí esperando pero pasará de largo por tu lado. De modo que no se puede decir que sea culpa de la fiesta, sino de las personas que asisten a la fiesta sin un espíritu adecuado a dicha fiesta.
A una fiesta se va de buena gana. Si vas sólo por "cumplir" con una costumbre o un compromiso social o algo similar, entonces no va a ser para ti una buena fiesta.
Pero si acudes con ganas, deseando disfrutar de lo que la FIESTA te ofrecerá, y sobre todo con ganas de participar tu también, entonces, la FIESTA SERÁ ALEGRE PARA TI, y tu aportarás también una parte de alegría a los demás participantes de la fiesta.
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