Anoche asistimos en la Catedral a un magnífico concierto. Una selección del Mesías de Haendel. Cuando llegamos, aún no habían abierto la puerta, y la cola daba la vuelta a la catedral y se metía casi hasta la plaza de la Marina. Una vez abierta, puedo dar fe de que el aforo se abarrotó, siendo este un hecho sin precedentes en un evento de este tipo en la Catedral, demostrando que en Málaga gusta la música clásica.A continuación unos fragmentos de la audición que capté con mi grabadora digital SONY.
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