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7 de octubre de 2012

LA RUPTURA DE LA MORAL Y EL MATRIMONIO

Adúlteros han existido siempre, divorcios también, sin embargo ya lo dijo Jesús, como así quedó plasmado por escrito en el Evangelio de San Marcos que hemos leído hoy en la Misa. Ya en tiempos de Moisés, hace muchos muchos siglos, se permitía en cierto modo el divorcio en el pueblo de Israel, pero este fue permitido debido a la dureza del corazón del pueblo, Moisés les dio un precepto, pero Cristo nos deja claro que no es así como Dios quiere, y que el plan de Dios es lo mejor para el hombre, que así lo pensó Dios el crear todas las cosas. Que Dios ante todo creó al hombre y a la mujer para que fuera pareja, para que se unieran. Dos personas complementarias. El verdadero y único matrimonio posible a los ojos de la fe que nos enseña cual es el camino correcto para que el hombre sea feliz. Los otros caminos, los que propone el mundo, son caminos errados. Dicen algunos que la Iglesia está anticuada, pero ¿no se han planteado que los que dicen que van de modernos, no han inventado nada nuevo? Dios nos propone el verdadero camino, que es JESUCRISTO, y en el está la dicha y la felicidad, y la paz.

Vamos a los tiempos modernos. En España, hasta la muerte de Francisco Franco, el que fuera Jefe del Estado 40 años, se que la familia fue muy cuidada. Todo esto, porque España era una nación católica, con sus errores y sus deficiencias, pero católica, es decir cristiana. Muchas de las leyes estaban basadas en la defensa de los valores, de la moral, de la familia, de la vida. Con Franco, no había divorcio en España. No estaba permitido. Por supuesto, el aborto era considerado lo que es según la razón y la naturaleza, un atentado contra la vida humana. Las familias eran numerosas en muchos casos. Creo que incluso recibían ayudas del Estado en esos casos. Eran otros tiempos. Unos tiempos, en eso, más ordenados que los actuales. Digamos que España estaba menos corrompida, y había unas mejores costumbres, y en muchas casas, había fe en Dios. Es cierto, que había censura en el cine, por ejemplo, pero se protegía a los menores. Era imposible que un quiosco fuera un lugar para corromper personas, vendiendo revistas pornográficas. Las películas en el cine eran más sanas e inocentes. En los primeros años de la televisión, esta era un verdadero servicio público dirigido al entretenimiento de todas las edades. Sólo existían dos canales a la muerte de Franco, y aún durante los primeros años del nuevo régimen constitucional. Menos esclavitud, más tiempo para otras cosas, menos enfermedades mentales.

Con la llegada del sistema democrático vigente, llegaron también los problemas. Si, había más libertad para hacer cada cual lo que le diera la gana, ¿pero es eso bueno, cuando se perjudica y se corrompe una sociedad? Yo estoy a favor de la libertad. En la Iglesia Católica somos libres, porque Cristo nos ha hecho libres, pero...¿libres para poder pecar y cometer toda serie de actos impuros y contra la moral y la decencia?

En eso se fue convirtiendo España en cuanto llegó Adolfo Suárez, y al amparo de la bonita palabra "libertad".

Yo, que nací ya cuando a Franco le quedaban 4 años de vida, pasé de ver como en la televisión te ponían clasificaciones de un rombo o dos rombos según la película fuera tolerada para unas edades u otras, me encontré todavía al final de mi infancia y principio de mi adolescencia con una España maldita, corrupta en lo moral, que enfermaba día tras día.

Al amparo de la libertad, los españoles fueron libres para crear inmundicia a la que llamaban cine. La famosa palabra "destape". A partir de 1976 en España, comienzan a rodarse películas que en otros países ya llevaban años mostrándose. La violencia, el sexo, erotismo, el morbo. "actores" como A.Pajares, el cual hoy en día tiene problemas mentales serios, o F.Esteso, realizaron muchas películas donde se podían ver a mujeres desnudas de cuerpo completo, despertando los instintos y las pasiones de miles de españoles. Ya en 1970, con Franco todavía vivo este tipo de cine iba colándose de forma embrionaria en las salas españolas, como el título "No desearás al vecino del quinto" La censura se había vuelto más permisiva, aprovechando la vejez de Franco, supongo yo. Otros directores se sumaron a esto. Lo peor vino a partir de 1977, el cine clasificado "S" por su alto contenido sexual, donde el argumento era lo de menos, y de lo que se trataba era de mostrar gente desnuda, aberraciones, adulterios, y toda clase de inmundicias que un número de españoles comenzaron a consumir al amparo de "la libertad", como algo bueno, cuando era todo lo contrario, era el principio de la ruina que vendría después.

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