Seguidores

26 de mayo de 2007

Creo en Dios pero no en los curas

Por Francisco Javier M.V.


"creo en Dios pero no en los curas", es una expresión que alguna gente contesta cuando se le pregunta acerca de su fe.





¿Eres tu uno de ellos? Espero que no.





Porque hoy vengo a contarte que esta frase, suele emplearse para querer decir, que en el fondo, la Iglesia te da igual. Tienes una fe vaga, crees que hay algo mas allá, pero no está definido completamente en tu pensamiento. Tampoco te preocupa. Tal vez sólo te preocupe la vida en la tierra, tu día a día, tu, pero no te plantees demasiado, ¿que será de mi cuando muera? Tal vez pienses que cuando uno muere, ya sólo queda la tumba. ¿Hay algún pensamiento de estos en tu cabeza hoy?





Si no crees en Dios, la respuesta no se aplica a esto que te voy a decir, pero si crees en la existencia de un Dios creador y Padre de todas las cosas, que es el verdadero autor de la vida que tienes dentro de ti, y has conocido de la existencia de Jesucristo, su verdadero Hijo que se entregó por nosotros en una cruz romana, vengo a decirte que "los curas", es decir, los "sacerdotes", han sido puestos por Dios en la Iglesia para servirnos y ayudarnos a llegar hasta Dios, a salvarnos y a ir un día al cielo. Jesús eligió a 12 hombres para que fueran sus apóstoles, y por tanto, los obispos son sus sucesores, entre ellos, el Papa, también Obispo, sucesor de San Pedro para guíar a la Iglesia. Los sacerdotes son los ayudantes de los Obispos, ya que estos no pueden llegar a todo el mundo. Los curas por tanto son muy necesarios para la Iglesia. Son además nuestros hermanos, no son una clase diferente, aunque por su ministerio en la Iglesia si son especiales, pero son personas como nosotros, con virtudes y defectos, y necesitados como todos nosotros, de Dios.





Por lo tanto, decir, "creo en Dios, pero no en los curas", no tiene ningún sentido racional. Si no creyeras en Dios, entonces a lo mejor sería lógico lo otro, pero si crees en Dios, entonces tienes que aceptar que haya sacerdotes, y respetarlos, y hacer todo lo que ellos dicen cuando leen la Palabra de Dios en la Iglesia o te dan un buén consejo, que para eso están también, pero si alguno, que también los puede haber, no es de buén ejemplo, entonces Dios no nos manda que lo imitemos, pero esos son la excepción, y para eso nos ha dado Dios una mente y un espíritu. Para que podamos saber las cosas.





Espero que desde hoy, ya no digas nunca mas: "Creo en Dios, pero no en los curas".

No hay comentarios: