LA DECISIÓN

Año 2004. Mes: Diciembre.

Mi edad, 33 años.

En primer lugar tengo que decir que cuando tomé la decisión de romper con la Iglesia Católica hace unos 15 años, sólo era Católico de nombre, y ahora reconozco que fue mi ignorancia acerca de lo que verdaderamente enseña la Iglesia Católica lo que en un principio me fue apartando, y que a ello contribuyeron falsos maestros y falsas doctrinas que yo poco a poco fui asimilando y me fui convirtiendo con el paso de los años.

Esas falsas doctrinas y falsos maestros a los que yo escuchaba con asiduidad a través de la televisión y leyendo sus libros me fueron haciendo cada vez mas fundamentalista, casi sin darme cuenta. En mi caso concreto se trataron al principio de falsos maestros disfrazados de apóstoles de Dios que entraron en mi vida a través de la televisión via satélite desde los Estados Unidos o los libros y folletos que publicaban. Hablo principalmente de nombres como Morris Cerullo, Benny Him, Keneth Copeland, etc. Mi conocimiento del idioma me facilitó la comprensión.

Empecé a atacar poco a poco las doctrinas de la Iglesia Católica sin tan siquiera pararme a estudiar seriamente los temas. Tan sólo mi razón y lo que yo entiendo en la Biblia. Esta es una doctrina comúnmente aceptada por las grupos divididos que no quieren a la Iglesia Católica de Cristo.

La libre interpretación de la Biblia, y la negación de la existencia del Magisterio de la Iglesia, la base de la existencia de tantos grupos y denominaciones diferentes. El mundo no sabe a que carta quedarse, no sabe que Iglesia es verdadera, y por tanto pueden llegar a perder la fe o simplemente a no convertirse ni creer en Dios.

Con el paso del tiempo y la oración, creo que el Señor me fue abriendo los ojos del entendimiento en muchas areas que me creaban confusión y perplejidad.