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21 de mayo de 2012

Los Príncipes visitan el martes un taller de Cáritas en Málaga


Los Príncipes de Asturias visitarán este martes en Málaga un taller para jóvenes de Cáritas que financian con parte del dinero de la herencia que les dejó en 2009 el empresario menorquín Ignacio Balada Llabrés.
Se trata del Centro de Formación Profesional Ocupacional Sagrada Familia, situado en el Campus Universitario de 'El Ejido', y que ofrece con el dinero de los Príncipes un taller de formación en mecánica y electricidad a jóvenes españoles e inmigrantes sin estudios y sin empleo, y que incluye un periodo de prácticas en empresas.
Don Felipe y Doña Letizia donaron 45.000 euros al centro el año pasado, a través de la Fundación Hesperia que crearon con el dinero que les legó para fines solidarios Balada Llabrés, al que no conocían.
Este empresario, fallecido el 18 de noviembre de 2009, decidió destinar su herencia, de unos 10 millones de euros, a los Príncipes y a los ocho nietos de los Reyes.
Dejó escrito que la mitad de esa herencia debía destinarse a la creación de una fundación de ámbito nacional y de interés general presidida por los Príncipes (la Fundación Hesperia), que ha tenido un patrimonio fundacional cercano a los cuatro millones de euros.
En 2011, la Fundación, con domicilio en el Palacio de la Zarzuela, destinó 180.000 euros a cuatro proyectos centrados en ayudar a los jóvenes a obtener un empleo, luchar contra el fracaso escolar, proteger a menores en situación de vulnerabilidad y financiar un proyecto de investigación científica en el ámbito de las enfermedades raras.
El taller de Cáritas Málaga es el último de esos cuatro proyectos que los Príncipes no habían visitado todavía.




1 comentario:

Ana Mari dijo...

Bueno parece ser que si existen empresarios ricos que dejan herencias para los mas desfavorecidos y que la monarquia española coopera a ello.

y que la iglesia es la que esta pendiente de que todo se cumple y este al lado de los pobres como siempre ha estado.

Pienso que se deberia criticar menos y observar mas y callar.