Bebida más sana que el alcohol y menos que el agua

Hace ya algunos días, nos sentamos Ana Mari y yo a tomar un refresco. El ambiente era de lo más hostil. Humo de tabaco, cervezas por aquí, por allí, tatuajes en el cuerpo (un día hablaré sobre eso), jóvenes perdidos en busca de "su felicidad". Total 1,50 euros dos refrescantes y continuamos la marcha. La Fanta fue creada en 1941 por un alemán durante la 2ª guerra mundial tras prohibirse en la Alemania Nazi comerciar con Estados Unidos y por tanto perder la coca cola. Buscando el nombre, alguien dijo: "Dejen volar su fantasía!", y otro dijo "¡Fanta!". Y quedó así. Dicen que al Papa Benedicto XVI le gusta bastante. La botella verde es "Sprite" (se pronuncia esprait), y es una bebida gaseosa con sabor a limón que se comenzó a vender, aunque con otro nombre en 1929.